Chardin (1699-1779) en el Museo del Prado.



























Un ejemplo de exploración de un itinerario creativo. Una exposición muy metodológica, donde lo importante es el proceso. 1 de marzo – 29 de mayo de 2011

 

15 comentarios:

  1. Exposción “Chardin”
    Me da la sensación que pinta por pasión a la técnica, por expresar a través de los pinceles, objetos, momentos, sensaciones. Evolución y reflexión constante en su pintura. Multiplica formas radiales, cuadradas, animales inanimados, siempre con cierta frontalidad, luz y sombra, apasionado por el dibujo. Paz y silencio, enormemente gráfico.

    Pablo Corroto Pradillo (nºexp.10093)

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  2. La verdad una exposición muy buena y muy didáctica. Creo que es un magnífico ejemplo para todos nosotros de esfuerzo, constancia, lucha y ganas por aprender y mejorarse a sí mismo. Me ha gustado realmente

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  3. Estoy de acuerdo con vosotros, también me ha gustado la exposición. Destacando la tenacidad y constancia del pintor en sus obras ya que de algunas encontramos hasta tres ejemplares de un mismo cuadro. Por otro lado señalar el dominio de las luces y sombras por parte de Chardin.

    Eva Mª Gil Barrio.

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  4. La exposición de este pintor muestra un claro ejemplo de rigurosidad y trabajo en todas sus obras. Sorprende la delicadeza y el detalle que da a todas sus pinturas, la capacidad de plasmar cada uno de los reflejos, transparencias, luces o sombras que invaden una imagen; así como la repetición de una misma escena hasta tres veces con pequeñas variaciones de una a otra. “Chardin coge a la naturaleza in fraganti [… ]” quizás sea la frase que mejor describe su pintura.

    Myriam Martín Santos

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  5. Sinceramente, me ha parecido un aburrimiento. Cierto es que se nota la maestría en la técnica, pero los temas son monótonos (bodegones y retratos) y ni uno solo de los cuadros llama la atención sobre los demás. En cambio, es recomendable la exposición de Caixaforum "Un mundo flotante", fotografías de Henry Lartigue que reflejan la parte más humana y divertida de la alta sociedad francesa de principios del XX.

    Pedro Campos Altozano

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  7. Andrea dijo...
    La exposición está muy bien preparada pero la obra de Chardin carece de interés para mí en el sentido de que el arte es productivo o de utilidad cuando genera, da lugar a más arte. En mi caso con respecto a la obra de Cardin esto no sucede, la obra del artista no me sugiere ni me resulta evocadora, tampoco me conmueve.

    Andrea Fernández Ramírez

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  8. objetos,gesto de todos los días.Mas allá del dibujo,y los objetos,lo realmente bonito es como trata la pintura.

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  9. Sara Macías Nieto26 de mayo de 2011, 14:02

    Claro que los temas eran monótonos, pero hay que ir mucho más allá. Las pinceladas de Chardin son una delicida. Al igual que con el arte figurativo, pop art, dada, neo-dada... hay que ir mucho más allá, no solo quedarse con la forma.

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  10. Destaca el proceso seguido por Chardin, la maestría de cada pincelada que crea una nueva sensación. Gran exposición.

    Andrea Vallés

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  11. Me ha llamado la atención la delicadeza y la minuciosidad que pone en sus obras, esas pinceladas tan bien estudiadas que van evolucionando cada vez más.
    Sara Quiroz Florián

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  12. fue una exposición muy interesante ya que la forma de presentar las obras nos permitía ver la evolución en sus obra tanto en los temas como en su forma de pintar.

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  13. Cuando vi la exposición de Chardin, me llamó la atención la minuciosidad y el cariño que ponía en cada cuadro. Chardin había recibido formación de artesano, y eso se nota. Pero a la vez, en sus obras había cierta libertad, algún trazo suelto, que las dotaba de un encanto extra. A medida que avanza en su vida y en su producción pasa de ser un simple pintor de bodegones a un artista consagrado, que es capaz de plasmar con el mayor realismo todo tipo de situaciones.

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  14. Jorge Suárez-Quiñones Rivas31 de mayo de 2011, 2:24

    Creo que ha habido una falta de comprensión con esta exposición. Lo que ha ocurrido lo entiendo totalmente porque me ha pasado algo parecido. Al principio cuando propusieron la exposición me pareció algo fuera de lugar. Pensaba, "por favor, cómo pueden mandarnos a ver esto con todas las cosas interesantes que hay que se adaptan mucho mejor a nuestra carrera". De todos modos fui, y tuve la suerte de estar acompañado por dos historiadores del arte. Entonces me di cuenta de que no habría comprendido nada de no haber sido por ellos. Me habría ido de la exposición pensando "qué academicista más aburrido", "menudo trepa que solo quería ascender". Pero en realidad era un revolucionario. Su etapa joven es increíble. Toda la inversión que hace de los valores de la pintura del momento, dejando de un lado el platonismo, toda la secuenciación de los estilos, la composición academicista del cuadro... Y aceptando la ESTÉTICA DE LO FEO, aceptando a Aristóteles, colocando en el centro de un cuadro una RAYA ABIERTA EN CANAL, con todas sus vísceras, rodeada de elementos podridos, que casi los puedes oler... Eso es una verdadera revolución!!!! Y hay que saber mirar para comprenderlo.

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  15. Jorge Suárez-Quiñones Rivas31 de mayo de 2011, 2:27

    De todos modos entiendo que, si vas solo y sin alguien que te lo explique, con los malditos carteles del PRADO, que están pensados para las masas turísticas que sólo quieren consumir carroñeramente "CULTURA" (dios qué horror) te quedes con una impresión terriblemente aburrida y vacía. Malditos carteles tristes que no dicen nada.

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